El personal de limpieza del Área Sanitaria Serranía se ha concentrado en la mañana de este martes a las puertas del Hospital de la Serranía de Ronda para exigir mejoras en sus condiciones laborales. En concreto, han solicitado una equiparación con los profesionales del sector en el resto de hospitales de la provincia.
Según ha informado Juan Carlos Corbacho, delegado de personal de la empresa UTE LISAN en el Hospital de la Serranía, esta plantilla, formada por 30 personas, «lleva años sufriendo el desprecio de la Administración andaluza y la discriminación con respecto al personal de limpieza de los hospitales».
Al respecto, el representante sindical ha manifestado que “este servicio fundamental, tal y como se demostró en la pasada pandemia, es esencial en el día a día del hospital y los centros de salud. Sin embargo, este servicio está privatizado. Se adjudica a una empresa privada, cuyo único aliciente es presentar beneficio económico”.
CCOO considera lamentable esta situación y exige al SAS que en los próximos pliegos se recoja la equiparación de estas trabajadoras con las condiciones laborales de las compañeras del propio SAS y las que trabajan en los hospitales. Al respecto, han explicado que se las tiene por limpiadoras de oficina, en lugar de centros hospitalarios.
Según CCOO, este personal de limpieza durante la pandemia dejó claro su importante papel para una adecuada atención (ningún sanitario tras una intervención volvía a entrar en ningún espacio sin que ellas actuaran limpiando y desinfectando). «Todo esto lo vinieron a realizar sin medios de protección, sin la formación necesaria por parte de la empresa, sin el conocimiento necesario de los productos efectivos a utilizar, etc», ha explicado.
Para el sindicato, !a pesar de este compromiso con su trabajo, estas trabajadoras han sido discriminadas por la empresa que presta este servicio. Su esfuerzo, dedicación y sacrificio no ha sido mérito suficiente para que esta tenga el menor reconocimiento y recompensa, a pesar de que la Junta de Andalucía sí que inyectó dinero extra a la empresa».
Inexplicablemente y sin dar explicaciones del porqué, la empresa adjudicataria lleva siete años prestando el servicio, quejándose de las sucesivas prórrogas sin el debido incremento presupuestario. «Desde la Junta de Andalucía, hace varios años que se anuncia la pronta publicación, pero esta no aparece por ningún lado sin que se dé ninguna explicación a este injustificable retraso. Mientras, las trabajadoras siguen sufriendo unas cargas y unas condiciones de trabajo inaceptables», ha finalizado.